El caso del menor que adquirió un décimo de la lotería del Niño que resultó premiado ha provocado la reacción del sector desde diferentes frentes. ASESFAM, que valora con objetividad y perspectiva la situación, invita a la reflexión de todos y a la adopción de medidas eficaces en materia de menores, loterías, juego…

 

Su presidenta, María José Gallardo, se posiciona al respecto en los siguientes términos:

 

“Hay una cosa que no es opinable, y es que el hecho en sí mismo es denunciable. La Ley 13/2011 de Regulación del Juego en su artículo 6.2 prohíbe la participación en los juegos de lotería a los menores de edad. Por lo que las autoridades competentes en la materia deberán tomar las medidas oportunas ante ello.

 

No obstante, convendría poner las cosas en contexto y no dramatizar ya que eso es lo que nos ha llevado a una situación no deseada para nosotros como sector.  Descontextualizar las cosas no nos va a llevar muy lejos. Igual que hemos defendido que un menor que accede a un salón de juego no implica que los menores jueguen y accedan libremente al juego, un menor comprando lotería, entendemos y esperamos que no debe significar que los menores juegan a la lotería y la compran libremente. Dicho esto, las normas están para cumplirlas y cuando no se cumplen hay que aplicar los mecanismos legalmente previstos para cada caso. Si estos mecanismos prevén una sanción para el establecimiento que vendió lotería al menor, entonces debe imponerse esa sanción.

 

Mas allá de pedir responsabilidades por lo que entendemos (y como he dicho antes, esperamos), sea un caso aislado que no debemos magnificar, pediría que este hecho sirva como punto de partida para reflexionar sobre el tema de menores, lotería, juego, prevención, formación…

 

El otro día el profesor Gómez Yáñez, cerraba su intervención en el congreso de ANESAR indicando que la lotería era el juego preferido por las personas afectadas por la ludopatía. Si en origen son niños los que participan en el sorteo más importante de la lotería del año, parece que se está restando importancia al hecho de que la lotería es un juego. Si, además, se les permite jugar y nadie toma consciencia de lo que ello puede suponer, teniendo en cuenta este dato del profesor, hay que mirarlo y con detenimiento.

 

También los medios y los políticos que han demonizado al sector este último año deberían reflexionar, y cambiar actitudes. No se puede atacar al sector como lo están haciendo y contar o ver lo de este chico como si fuera un héroe. Con ello se está fomentando una mala práctica del juego, lo cual es absolutamente inaceptable.

 

En todo caso, creo que lo que se haga debe hacerse desde una perspectiva de prevención, formación, adopción de medidas eficaces… pero, eso sí, huyendo del sensacionalismo y dramatismo porque no conduce a nada positivo y nos perjudica a todos”.